Los leones marinos son animales carnívoros que se alimentan de calamares y pulpos. También comen grandes cantidades de pescado, como sardinas, anchoas, arenques, salmón, pompano y caballa.
El pescado es la principal fuente de alimento para los leones marinos. Los leones marinos también comen cangrejos y almejas. La dieta exacta del león marino varía según las fuentes de alimentación que sean abundantes. A menudo cazan cerca de la costa cuando hay una cantidad adecuada de presas. Sin embargo, se trasladan a áreas más alejadas de la costa para encontrar más comida cuando sea necesario, aunque esto aumenta el riesgo de que las ballenas y los tiburones se los coman.
Cuando las fuentes de alimentos son extremadamente escasas, los leones marinos pueden alimentarse de sus crías para sobrevivir. Los investigadores creen que consumir otros leones marinos es un instinto natural que ayuda a controlar la población de la especie, especialmente en tiempos de suministro insuficiente de alimentos.
Una vez que los leones marinos capturan a sus presas, se tragan la comida entera sin masticarla. Sin embargo, usan sus 34 a 38 dientes para desgarrar grandes partes de sus presas que son difíciles de tragar. También usan sus dientes para romper las conchas de las almejas y comer los alimentos blandos en el interior. Los leones marinos a menudo voltean su presa muchas veces hasta que encuentran la posición correcta para digerir los alimentos fácilmente.