Los zorros rojos, que son omnívoros, comen una gran variedad de animales, pero prefieren roedores pequeños como ratones, campañoles, hámsters, jerbos, rebabas y marmotas. También cazan y comen zarigüeyas, mapaches, conejos, aves, reptiles e insectos. Cuando la carne escasea, complementan su dieta con materia vegetal como bayas, frutas, pasto y tubérculos. Alrededor de las viviendas humanas, también se alimentan de comida para mascotas y basura.
Además de su presa habitual, los zorros rojos a veces atacan a los ungulados jóvenes, como los cervatillos de ciervo. Tampoco son reacios al asalto de granjas y ranchos para aves domésticas como las gallinas. A veces se alimentan de carroña.
Los zorros rojos suelen cazar en la tarde y temprano en la mañana. Localizan pequeños roedores por sonido y luego saltan sobre ellos desde hasta 15 pies de distancia. Una vez que han matado, poseen su captura y la defienden incluso contra animales más grandes. También se ha sabido que se dedican a matar los excedentes, matando muchas más presas de las que podrían comer. Debido a que esto puede afectar a las poblaciones de aves de caza tanto domésticas como silvestres, su número se controla en algunas áreas. Por lo general, los zorros rojos cazan solos, pero en áreas ricas en recursos, a veces viajan en grupos.