Los musulmanes pueden comer carne de res mientras sigan ciertas pautas. El matadero de la vaca debe matar al animal cortándole la garganta de manera rápida y misericordiosa, y la carcasa debe sangrarse completamente.
La carne preparada de esta manera se llama "halal". Los musulmanes también deben evitar la carne de res que ya han comido los carroñeros o la carne que proviene de un cadáver que no fue sacrificado sino que murió por otros medios. El Corán prohíbe expresamente comer carne de animales sacrificados con fuerza contundente, estrangulamiento, una caída precipitada o ser corneado, así como carne sacrificada a un dios. El único tipo de carne que el Islam prohíbe categóricamente es la carne de cerdo.