Las personas necesitan lípidos porque se usan para generar energía, generando ATP en la respiración celular, construyendo triglicéridos y fosfolípidos de almacenamiento para las membranas y fabricando ciertas hormonas, según el Dr. Dawn Tamarkin de Springfield Technical Community College. Los lípidos son grasas esenciales, y existen diferentes tipos de lípidos que incluyen triglicéridos, fosfolípidos y esteroides.
Los triglicéridos se utilizan principalmente como reservas de energía, explica Tamarkin. El cuerpo descompone los triglicéridos y utiliza los productos para la respiración celular. Los triglicéridos también se almacenan como grasa después de que el sistema digestivo los descomponga en glicerol y ácidos grasos, que se absorben para la producción de quilomicrones. Una vez que se crean los quilomicrones, se difunden en la leche y pronto entran en la sangre. Los ácidos grasos se extraen de los quilomicrones y se envían a los tejidos que los requieren a medida que los quilomicrones viajan a través de la sangre.
El cuerpo utiliza ácidos grasos para la respiración celular al descomponerlos en moléculas de dos carbonos. Estas moléculas luego entran en el proceso de respiración celular para producir ATP. Otro uso de los ácidos grasos es para construir triglicéridos de almacenamiento, o grasa para su uso posterior, y fosfolípidos para las membranas del cuerpo. El colesterol juega un papel clave en la producción de hormonas particulares y en la producción de sales biliares. También constituye la bicapa lipídica de las células, señala Tamarkin.