La motivación es importante porque proporciona el impulso para que las personas alcancen sus objetivos, mantengan sus responsabilidades o resuelvan problemas. la motivación puede crearse o reactivarse observando los objetivos de uno, evaluando los riesgos de lograr esos objetivos y crear hitos, así como recompensas personales por progresar.
La motivación puede ser difícil para las personas que trabajan en entornos de oficina profesionales donde pueden sentir que su trabajo duro pasa desapercibido o que las presiones constantes de un entorno competitivo las desgastan. Es importante mantener la motivación en la fuerza laboral, especialmente porque es uno de los principales factores impulsores de un personal que es productivo y trabaja en conjunto de manera dinámica. Para mantener la motivación del personal, a la gerencia se le suele recomendar tratar de averiguar qué es lo que mantiene a su personal productivo y comprometido en su trabajo. Sin embargo, la motivación no siempre es importante para mantener la productividad. También puede ser una razón importante por la que las empresas retienen a sus empleados.
Debido a la importancia obvia de la motivación no solo a nivel personal sino también fundamental en el contexto de los negocios, los gerentes a menudo crean métodos para impulsar y mantener la motivación en sus empleados. Algunos ejemplos de esto en acción se pueden ver en los programas de incentivos monetarios o cuando se otorgan premios y títulos de reconocimiento a los empleados que continúan realizando un gran trabajo. Algunas empresas también usan grupos de bonificación u organizan focos en varios empleados. Esto los hace sentir más conectados con la compañía y, por lo tanto, más motivados para trabajar hacia el éxito de la compañía.