Los intestinos de los herbívoros son mucho más largos en proporción a la longitud de su cuerpo que los de los carnívoros. Los carnívoros tienen el intestino delgado de 3 a 6 veces su longitud corporal. Los herbívoros tienen el intestino delgado igual a 10 a 12 veces la longitud de su cuerpo, en algunos casos incluso más.
En comparación con la materia vegetal, la carne es relativamente fácil de digerir. Gran parte de la digestión de la carne tiene lugar en el estómago antes de pasarla al intestino delgado donde se absorben los nutrientes. Las plantas contienen una gran cantidad de fibras no digeribles, y para extraer los nutrientes, los herbívoros deben usar las bacterias que viven en sus entrañas para descomponer la celulosa y otros materiales. Además, el intestino más largo del herbívoro aumenta la cantidad de superficie disponible para absorber los nutrientes extraídos.
