Las tormentas de arena ocurren típicamente en los desiertos, donde la arena es abundante. Se producen cuando los vientos fuertes soplan alrededor de arena suelta en grandes cantidades. Las tormentas de polvo, que son similares a las tormentas de arena, consisten en tierra y escombros en lugar de arena.
Las tormentas de arena son más frecuentes en épocas del año cuando el aire caliente sobre el desierto causa inestabilidad en la atmósfera inferior. Esto hace que se desarrollen fuertes vientos en la capa atmosférica más baja, que se llama troposfera. Las tormentas de arena pueden causar daños significativos a los hogares y maquinaria. También han sido responsables de numerosas muertes en todo el Medio Oriente y el norte de África.
