Hay varias formas diferentes de crear oxígeno, pero la más fácil es pasar una corriente eléctrica a través del agua para separar los átomos de hidrógeno de los átomos de oxígeno. Este proceso se llama electrólisis y es uno de Las principales formas en que las estaciones espaciales crean aire respirable para los astronautas. La electrólisis es un procedimiento relativamente fácil, por lo que es una técnica común para extraer oxígeno en forma de agua.
El oxígeno no puede ser producido directamente por las personas; solo se puede liberar de los otros átomos a los que se une. Esto es lo que sucede cuando tiene lugar la electrólisis, aunque existen otros métodos mediante los cuales los científicos también pueden eliminar el oxígeno de los materiales. Por ejemplo, si los científicos agregan un elemento a un óxido, que es un químico que contiene oxígeno, pueden liberar el oxígeno del óxido.
Las plantas producen oxígeno a través del proceso de la fotosíntesis. En este proceso, las plantas combinan la energía solar con dióxido de carbono y agua para producir azúcares y oxígeno. El oxígeno no suele ser estable en una atmósfera, y sin una fuente constante para reemplazar lo que se une con otros materiales, la atmósfera eventualmente se convierte en oxígeno agotado. Esto hace que muchos científicos sospechen que cualquier planeta con una atmósfera oxigenada robusta debe tener formas de vida presentes.