El ciclo del agua comienza con la evaporación del agua subterránea y termina con la precipitación. Hay tres pasos para el ciclo del agua.
Debido a que la superficie de la Tierra está compuesta de un 70 por ciento de agua, es natural que parte de esa agua se evapore. Aproximadamente el 85 por ciento de la evaporación se produce en los océanos del mundo. Una vez evaporado, el agua se condensa en la segunda parte del ciclo del agua. El vapor se condensa de nuevo en el agua que se filtra en el suelo o se eleva en nubes. Una vez que las nubes se llenan de agua, la lluvia u otras formas de precipitación caen. El ciclo del agua nunca se detiene. Es un proceso continuo que recicla constantemente el suministro de agua de la Tierra.
