Un grillo tiene seis patas y pertenece al orden científico 'Orthoptera'. Hay dos pares de patas unidas al tórax, mientras que las patas traseras están unidas al abdomen.
Las patas delanteras y las patas intermedias, o "piernas para caminar", son casi idénticas. Las patas traseras, sin embargo, son mucho más grandes y permiten que el grillo salte o escape fácilmente de los depredadores. Si bien es un mito popular que un grillo chirría al frotarse las piernas, el chirrido en realidad proviene del órgano estridulador, una vena grande que recorre la parte inferior de cada ala, y solo lo hacen los machos.