En la teoría psicoanalítica, los tres niveles de conciencia descritos por Sigmund Freud son las mentes conscientes, preconscientes e inconscientes. Freud comparó esta teoría con un iceberg con una punta visible, la mente consciente; un medio oculto pero visible, el preconsciente; y un bulto oculto bajo el agua, el inconsciente.
En el modelo de la mente de Freud, la mente consciente está formada por los pensamientos y sentimientos de los que una persona es activamente consciente y capaz de razonar. Lo preconsciente está formado por toda la memoria disponible a la que no ha accedido la mente consciente. La mente inconsciente consiste en instintos reprimidos, sentimientos e impulsos que son negativos o vergonzosos. Freud teorizó que lo preconsciente e inconsciente ejerce una poderosa influencia sobre la mente consciente sin la conciencia de una persona.