Los síntomas más comunes del liquen plano de la boca, también conocido como liquen plano oral, son dolor, inflamación, enrojecimiento, úlceras y la aparición de manchas blancas en forma de encaje en la parte interna de la mejilla, según La Academia Americana de Dermatología. Los síntomas también pueden presentarse en los labios, las encías o la lengua.
El liquen plano oral, un trastorno autoinmune inflamatorio crónico, puede causar una sensación de mal gusto y una menor tolerancia a la comida caliente y platos picantes, informa la Clínica Mayo. Inflamación de las encías y dolor o sangrado al cepillarse. El liquen plano oral a menudo ocurre junto con infecciones del liquen plano en otras partes del cuerpo, como la piel, los genitales, las orejas y el cuero cabelludo. El síntoma más común de estas infecciones es la presencia de lesiones rojas o púrpuras en el área afectada. El liquen plano de los ojos, las uñas o el esófago, todos los cuales son formas muy raras de la afección, pueden acompañar al liquen plano oral.
Los regímenes de tratamiento para el liquen plano oral controlan los síntomas de la afección en lugar de curarlos, señala Mayo Clinic. Las opciones de tratamiento incluyen corticosteroides orales o tópicos para contrarrestar la hinchazón y la inflamación y los ungüentos para aliviar el dolor tópico. En casos extremos donde el trastorno afecta varias partes del cuerpo además de la boca, un médico puede prescribir medicamentos inmunosupresores tópicos, como Protopic, para tratar las llagas, aliviar el dolor y disminuir la gravedad de la enfermedad.
