Los síntomas de la esclerosis subcondral incluyen presión y dolor dentro del hueso, explica Carol Eustice para About.com. Algunos signos físicos de la afección son una densidad ósea más gruesa y un mayor flujo sanguíneo.
La esclerosis subcondral es una afección a menudo asociada con la osteoartritis en la cual la capa subcondral del hueso se endurece, engrosa y desarrolla quistes, según Eustice. Los quistes y el aumento de la densidad ósea ejercen presión sobre los nervios, que se manifiesta como dolor de artritis. Esta afección generalmente se diagnostica con rayos X. El hueso con esclerosis subcondral aparece blanco en los escáneres de imágenes porque el hueso es más denso que el resto del hueso.
"La osteoartritis, una degeneración de los huesos, las articulaciones y el cartílago, es a menudo el culpable de la esclerosis subcondral", afirma el Centro de Artritis Johns Hopkins. Al inicio del desarrollo de la enfermedad, las personas con más frecuencia experimentan dolor en las articulaciones; problemas en las articulaciones, como el bloqueo de articulaciones; y rigidez que generalmente aumenta al final del día o después de una actividad excesiva. Aparte de la esclerosis subcondral, otros síntomas y signos de osteoartritis son agrandamientos óseos de la articulación y sensibilidad articular. A medida que avanza la enfermedad, el rango de movimiento se ve afectado, seguido gradualmente por un edema o líquido en la articulación y quistes. La osteoartritis se produce principalmente en los dedos, en la base del pulgar, en las rodillas y en las caderas.