Según la Clínica Mayo, un nivel típico de azúcar en la sangre en niños es inferior a 100 miligramos por decilitro. Un nivel de 100 a 125 indica prediabetes y más de 126 mg /dL en dos pruebas conduce a un diagnóstico de la diabetes.
Los niños diagnosticados con diabetes también reciben pruebas para diferenciar entre diabetes tipo 1 y diabetes tipo 2. La diabetes es un trastorno metabólico que causa niveles elevados de azúcar en la sangre. Los síntomas incluyen aumento del hambre y la sed, junto con la micción frecuente. La diabetes puede resultar en complicaciones de salud si no se trata. Con el tiempo, puede causar insuficiencia renal, accidentes cerebrovasculares, enfermedades cardíacas y daños oculares, señala Wikipedia. La enfermedad es causada por la producción inadecuada de insulina por parte del páncreas o el cuerpo que no responde a la insulina que se produce.