Los árboles, el pasto y el ganado son ejemplos de factores bióticos en la mayoría de las sabanas, mientras que la temperatura, la luz solar y la composición del suelo son factores abióticos importantes. Los factores específicos son los que determinan el impacto de las relaciones bióticas y las influencias abióticas Un ecosistema particular. Un estudio típico investiga el efecto de la densidad de los árboles en los pastos durante una sequía en las sabanas africanas.
Los científicos comúnmente hacen modelos que se aproximan a las acciones de los factores abióticos y bióticos a medida que ocurren en la naturaleza. Los incendios forestales y la fertilidad del suelo son ejemplos de factores abióticos que afectan las plantas a nivel del suelo en la sabana brasileña. El fuego reduce la resistencia de una planta a las enfermedades, mientras que la fertilidad del suelo aumenta el crecimiento de la planta. Las interacciones entre los factores ecológicos y las especies o el hábitat objetivo pueden entenderse mejor cuando el modelo incluye todos los factores bióticos y abióticos en juego.
Los modelos físicos incluyen mesocosmos, laboratorios en el campo que simulan relaciones ecológicas utilizando organismos naturales y estructuras de control. La investigación evolutiva requiere modelos conceptuales para aproximar lo que ocurre en los marcos de tiempo geológicos. Por ejemplo, el modelo Red Queen propone que el cambio evolutivo a largo plazo se debe a las adaptaciones genéticas constantes a factores bióticos, como la depredación y la competencia por los recursos.
El modelo de Court Jester sugiere que los eventos abióticos, como los ajustes de temperatura y los terremotos, producen alteraciones genéticas rápidas para la supervivencia en un entorno diferente. Incluso cuando los factores abióticos son evidentes, la respuesta genética puede ser lo suficientemente masiva como para cambiar todo el entorno. Los modelos Red Queen y Court Jester trabajan juntos para explicar el cambio evolutivo.