Las cinco funciones principales del sistema esquelético incluyen apoyar el cuerpo, almacenar minerales, producir células sanguíneas, proteger órganos y proporcionar movimiento, según Cleveland Clinic. Los huesos mantienen la posición del cuerpo, producen movimientos eficientes y Permitir a los humanos sentarse, pararse y caminar.
Cleveland Clinic indica que los huesos sostienen el cuerpo al adherirse a los tejidos blandos, músculos y órganos a través de tejidos conectivos, como los ligamentos y los tendones. Los huesos también protegen los órganos vitales necesarios para la supervivencia. El cráneo encierra el cerebro; Las costillas protegen los pulmones; la columna vertebral mantiene intacta la médula espinal; y la pelvis protege los órganos reproductivos. Los huesos mueven el cuerpo cambiando las fuerzas y direcciones generadas por los músculos.
El sistema esquelético proporciona otras dos funciones importantes que son menos obvias. La Clínica Cleveland explica que los huesos almacenan depósitos de calcio, fósforo y lípidos hasta que el cuerpo necesita estas sustancias. Los lípidos se utilizan para la producción de energía y se almacenan en la médula ósea amarilla. La médula ósea roja produce glóbulos rojos, glóbulos blancos y otros elementos sanguíneos esenciales en el interior de los huesos. Los glóbulos rojos transportan oxígeno a todas las partes del cuerpo humano, y los glóbulos blancos protegen contra las infecciones, según la BBC.
El crecimiento óseo y el esqueleto determinan el tamaño y las proporciones de un cuerpo. Cleveland Clinic revela que los huesos comienzan a crecer en el útero aproximadamente a las seis semanas y continúan creciendo hasta los 25 años en adultos adultos.