Los lobos grises son caninos grandes que varían de 3 a 5 pies de largo, pesan de 60 a 145 libras, viven por 13 años y se alimentan de mamíferos de pezuña grande. Estos animales viven en América del Norte en una variedad de hábitats desde tundra y desiertos hasta bosques y praderas.
Los lobos grises tienen abrigos que van del blanco al negro y suelen ser una mezcla de gris y marrón. Los machos pesan hasta 145 libras, mientras que las hembras son más pequeñas, con un peso de alrededor de 100 libras. Estos carnívoros viven en gran parte de ciervos, alces, bisontes y alces, aunque también cazan caza menor.
Los lobos grises, casi erradicados de América del Norte por la caza, están comenzando a regresar a sus hábitats anteriores en Wyoming, Montana, Idaho, Oregon, Wisconsin y Michigan. Una subespecie del lobo gris, el lobo mexicano, vive en Arizona y México. A partir de 2014, había hasta 11,000 lobos en Alaska, 3,700 en Wisconsin y Michigan y casi 2,000 en las Montañas Rocosas del Norte.
Los lobos grises se comunican a través del sonido, el lenguaje corporal y el marcado de olores. Los lobos aúllan para comunicarse con otros lobos en largas distancias. Cada lobo tiene su propio aullido único que ayuda a su manada a reconocerlo. Los lobos son animales sociales, viven en manadas de hasta 15 miembros.