El nombre de rutenio proviene del nombre latino de Rusia, ruthenia, ya que es aquí donde se descubrió por primera vez. El rutenio fue el último de los seis miembros del grupo de platino por descubrir.
El químico ruso Gottfried Osann creyó haber descubierto tres nuevos metales de platino en 1828, a los que llamó polinio, pluranio y rutenio. Sin embargo, en 1944, otro químico ruso llamado Karl Klaus demostró que Osann solo había descubierto una forma muy impura de rutenio. Como fue el primero en aislar el elemento en su forma pura, generalmente se le da crédito por el descubrimiento. Sin embargo, aún optó por usar el nombre ideado por Osann debido a que los minerales de platino originales de los que se derivó el rutenio se extrajeron en Rusia.
El rutenio solo se encuentra con otros metales de platino en algunos lugares del mundo, incluidas las montañas de los Urales en Rusia. También se encuentran especímenes en las operaciones de extracción de níquel en Ontario, Canadá y en los depósitos de piroxinita de Sudáfrica.
El rutenio es un metal muy duro, de color blanco plateado que se oxida de manera rápida ya veces violenta cuando se expone al aire. Aunque es extremadamente frágil, este metal se usa a menudo como un endurecedor que se agrega a otros metales del platino. En ocasiones, también se agrega al titanio para que sea más resistente a la corrosión.
