El ejercicio y la buena nutrición son esenciales para mantener un sistema muscular saludable, de acuerdo con Healthline. El entrenamiento de fuerza puede retardar la pérdida de músculo que acompaña al envejecimiento, fortalecer el músculo y el tejido conectivo, aumentar la densidad ósea, reducir las posibilidades de lesiones y aliviar el dolor artrítico, según WebMD. Los estudios también muestran que el entrenamiento de fuerza mejora el equilibrio, reduce el riesgo de caídas, ayuda a controlar los niveles de glucosa en la sangre y mejora el sueño y la salud mental.
El dolor muscular puede indicar cualquiera de una amplia variedad de trastornos que van desde moretones hasta esclerosis múltiple, según Healthline. Hay tres tipos de músculos en el cuerpo: músculo esquelético, cardíaco y liso. El músculo esquelético está bajo control voluntario, con más de 600 músculos esqueléticos que representan el 40 por ciento del peso corporal. El músculo cardíaco implica un movimiento involuntario y es responsable de la pulsación rítmica que bombea sangre a través del cuerpo. El músculo liso también es involuntario y se encuentra en las paredes de los órganos huecos, las vías respiratorias y los vasos sanguíneos.
Los ejercicios básicos ayudan a fortalecer los músculos abdominales, dorsales y pélvicos y permiten que el cuerpo realice actividades diarias. Algunos alimentos que se necesitan para mantener un buen tono muscular incluyen los pescados grasos como el salmón, que contiene vitamina D; Huevos para proteínas completas; y aceite de oliva que contiene grasas monoinsaturadas.