Existe una relación directa entre la absorbancia y la concentración. Cuanto mayor es la absorbancia de una sustancia, más concentrada estará su solución en agua u otro medio. En química, este es un principio conocido como La Ley de Beer-Lambert.
La ley mide la absorbancia de una sustancia en un medio determinando qué tan bien la luz pasa a través de él. Cuanto más concentrada esté la sustancia, menos luz pasa a través de ella. La ley también establece que al juzgar la penetración de la luz utilizando un espectrómetro, pueden pasar menos longitudes de onda de la luz, tanto visible como invisible, a medida que aumenta la concentración de la sustancia.