El abuso verbal y emocional puede ser una forma para que el abusador controle a la víctima, manteniéndola en la relación y disminuyendo su autoestima, dice Loveisrespect.org. Los comportamientos tales como llamadas excesivas, mensajes de texto constantes y monitoreo digital son signos de abuso verbal que pueden no incluir insultos abiertos.
El abuso verbal con frecuencia empeora cuanto más tiempo permanece la víctima en la relación, afirma el Día Uno. Las personas que sufren de abuso emocional pueden encontrar ayuda llamando a las líneas directas locales o nacionales de abuso doméstico, como la línea directa nacional de violencia doméstica.