Según la gravedad de la fractura del peroné, el tratamiento puede variar desde limitarse simplemente a la cirugía, según Scott & Salud blanca. Cuando se sospecha por primera vez que el peroné puede estar fracturado, es mejor elevar la pierna y aplicar hielo.
Si la rotura no es lo suficientemente grave como para requerir cirugía, se puede poner una bota en el paciente para reducir el movimiento de la pierna, afirma Scott & Salud blanca. Se recomiendan muletas para reducir la cantidad de peso en el peroné lesionado. Si la ruptura es severa, se puede completar la cirugía para colocar una placa de metal o una varilla en el hueso. No importa la gravedad de la fractura, es importante someterse a una terapia física en la etapa de curación para recuperar el movimiento completo de la pierna.