El órgano principal del sistema tegumentario, y el órgano más grande del cuerpo, es la piel. La función principal de la piel es ayudar al cuerpo a mantener la homeostasis con su entorno. El sistema tegumentario está compuesto por la piel, cabello, uñas y glándulas exocrinas.
Para mantener la homeostasis, la piel protege los tejidos y órganos vivos internos del cuerpo de la invasión de organismos infecciosos. La piel también regula el equilibrio de líquidos en el cuerpo para proteger contra la deshidratación y ayuda al cuerpo a mantener una temperatura estable. Además, la piel almacena agua y algunos tipos de tejido adiposo. La piel también sirve como receptor para el tacto, el dolor y el calor.