El oso polar está en la parte superior de la cadena alimenticia de los animales árticos, ayudando a controlar la población de focas alimentándose casi exclusivamente de focas. Los osos polares dependen del alto contenido de grasa de las focas para combustible sus cuerpos y mantener buenos niveles de grasa necesaria dentro de sus propios cuerpos.
Los osos polares pueden comer ballenas varadas, peces o animales más pequeños en momentos de escasez de alimentos. Comer estos otros animales se hace por necesidad y no por una preferencia por peces o presas pequeñas.
Los osos polares adultos no tienen más depredadores que otros osos polares. Los cachorros de osos polares corren el riesgo de ser comidos por otros osos polares desnutridos, pero los adultos se encuentran en la parte superior de la cadena alimenticia.