El clima de los biomas de agua dulce varía según el tipo de ecosistema; los estanques y lagos disfrutan de temperaturas moderadas con variaciones estacionales, mientras que los humedales generalmente existen en áreas más cálidas y húmedas. Algunos cuerpos de agua más grandes en biomas, como lagos y grandes estanques, influyen en la temperatura del aire circundante y los niveles de humedad mediante ciclos de calor Energía térmica en el aire circundante. Otros, como los pequeños ríos y arroyos, derivan la influencia de sus entornos, cambiando la forma física y la temperatura según las condiciones locales.
El clima en los biomas de agua dulce varía según las estaciones y la ubicación geográfica. Algunos estanques y lagos se producen de forma estacional, rellenando los lechos naturales con abundantes lluvias de primavera y verano. La humedad adicional se evapora en el aire, moderando las temperaturas y produciendo condiciones locales como neblina y niebla. La temperatura del agua en estos cuerpos acuáticos fluctúa con las estaciones, cambiando la composición física. El agua más fría forma hielo en algunos lagos y estanques durante el invierno, lo que reduce la actividad de los organismos internos.
La temperatura y las condiciones de los arroyos y ríos varían, fluctuando con las estaciones y la ubicación. Las fuentes de corriente, que a menudo extraen agua de las profundidades de la Tierra, presentan temperaturas más frías que las bocas. Arroyos y ríos aparecen en todo el mundo, existiendo en climas fríos, del norte, condiciones moderadas y lugares cálidos y húmedos.