Las opciones de tratamiento para los calambres musculares que afectan a diferentes grupos musculares en el cuerpo incluyen una compresa fría o caliente, medicamentos antiinflamatorios y un relajante muscular recetado, según Healthline. Los médicos también pueden sugerir el tratamiento de problemas médicos subyacentes para reducir los síntomas y los espasmos.
Use hielo, un paño frío, una almohadilla térmica o un paño caliente para aliviar los calambres musculares mientras comienza un espasmo, recomienda Healthline. Si el dolor persiste, tome un ibuprofeno u otro medicamento antiinflamatorio y estire los músculos afectados lentamente.
Si no puede dormir adecuadamente debido a los calambres musculares, comuníquese con un médico, informa Healthline. También es importante consultar a un médico si experimenta cólicos intensos y recurrentes que no pueden aliviarse con el estiramiento. Un relajante muscular con receta se prescribe típicamente para relajar los músculos y aliviar los espasmos. Los médicos también pueden recomendar tomar suplementos si la causa de los calambres es una deficiencia de calcio o potasio.
Evite los ejercicios de distensión muscular que pueden provocar calambres, señala Healthline. Haga ejercicios de estiramiento o de calentamiento antes de comenzar una rutina de ejercicios para evitar la tensión muscular y las lesiones. Beba muchos líquidos, especialmente durante el ejercicio, ya que el cuerpo tiende a perder más agua durante las actividades físicas. Pregúntele a un médico acerca de los suplementos vitamínicos que pueden ayudarle a obtener todos los nutrientes y minerales esenciales. Consuma alimentos ricos en calcio y potasio, especialmente naranjas, leche y plátanos.