La forma más efectiva de reducir el tamaño aparente de los hombros es a través de ejercicios y estiramientos correctivos. Los hombros pueden aparecer grandes o encorvados debido a una mala postura y problemas musculares, que hacen que se levanten y redondeado.
Dos problemas comunes del hombro son el síndrome de la cruz superior y tener escápulas aladas. La primera es una condición postural en la que la parte superior del cuerpo se curva hacia adelante y los hombros se elevan hacia arriba, creando una apariencia poco estética con los hombros prominentes. Las escápulas aladas son el resultado de la tensión muscular anterior y los músculos serratos débiles, lo que hace que los omóplatos "salten" y creen un perfil malo.
Los ejercicios como los pull-ups, los pulóveres, las filas y los tirones altos del hombro pueden fortalecer los músculos de la espalda y los hombros, empujándolos hacia abajo en una posición de descanso adecuada. Los estiramientos correctivos, como las dislocaciones de los hombros y ciertas posturas de yoga pueden ayudar a aumentar la flexibilidad y también permitir que los hombros descansen en una posición más natural.
Como siempre, una persona que busca mejorar la apariencia del hombro debe hablar con un médico antes de comenzar un régimen de entrenamiento. Dependiendo del nivel de condición física y la movilidad articular, ciertos ejercicios podrían no ser saludables. Algunas cosas, como el yoga o el tai chi, son seguras de intentar siempre que la persona no trabaje demasiado ni se lastime en el proceso.