La propiedad de mascotas, y la propiedad de gatos específicamente, ha demostrado ser beneficiosa para la salud humana en una variedad de formas, incluida la reducción del estrés general y la alteración positiva del estado de ánimo, además de marcadores más específicos de mejor salud, como el corazón bajo tasa y presión arterial. Los estudios que han cubierto este tema señalan que la presencia de un animal de compañía, como un gato, tiene un marcado impacto positivo en el estado de ánimo humano. Sin embargo, llegar a la raíz exacta de algunos de estos supuestos beneficios para la salud no es fácil; es difícil determinar la causa y el efecto en estas situaciones.
Debido a que algunas personas que tienen mala salud pueden no sentirse capaces o estar dispuestas a asumir la responsabilidad de tener una mascota, es posible que algunos de los estudios que indican una correlación entre la buena salud y la tenencia de una mascota no estén realmente apuntando a la causación. Es decir, podría ser que los dueños de mascotas sean, para empezar, un grupo de personas que se auto seleccionen, lo que significa que los estudios que buscan encontrar una conexión entre la salud humana y la propiedad de mascotas serán exitosos, pero no necesariamente porque la propia mascota es responsable de su buena salud del dueño Los beneficios para la salud pueden ser más difíciles de demostrar en los dueños de gatos, que no tienden a hacer ejercicio con sus mascotas como lo hacen los dueños de perros.