A medida que aumenta la profundidad en la Tierra, también aumenta la temperatura. El núcleo interno de la Tierra es la parte más caliente de la Tierra, con temperaturas cercanas a los 10.800 grados Fahrenheit, según LiveScience. Las capas que rodean el núcleo de la Tierra aumentan significativamente la temperatura a medida que se acercan al núcleo. En otras palabras, cuanto menor sea la distancia entre el núcleo interno y la corteza terrestre, más caliente será la temperatura.
Según National Geographic, la Tierra está dividida en tres capas principales: la corteza, el manto y el núcleo. La corteza es la sección exterior de la Tierra y tiene una capa exterior sólida con una profundidad de aproximadamente 31 millas. Ya que es la sección más alejada del núcleo interno, también es la más fresca.
Debajo de la corteza terrestre se encuentra el manto, que está formado por una capa de magma caliente y pegajosa, rocas semisólidas y minerales. El manto tiene una profundidad de aproximadamente 1806 millas desde la corteza y alcanza temperaturas cercanas a 1,832 grados Fahrenheit.
El núcleo, la capa interna de la Tierra, tiene la temperatura más alta. Está dividido en dos secciones: el núcleo externo y el núcleo interno. El núcleo externo, la región que rodea al núcleo interno, tiene una profundidad de 3.981 millas desde la corteza terrestre y es ligeramente más frío que el núcleo interno, con temperaturas cercanas a los 6.692 grados Fahrenheit. El núcleo interno, sin embargo, es el más caliente. Los científicos no están seguros de su temperatura exacta, pero las investigaciones muestran que tanto el núcleo externo como el interno tienen aproximadamente 10,800 grados Fahrenheit. Esto es aproximadamente tan caliente como la superficie del sol, según LiveScience.