Los médicos tratan un corazón agrandado con varios tipos de medicamentos, incluidos diuréticos, inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina, bloqueadores de los receptores de la angiotensina, bloqueadores beta y digoxina, señala la Clínica Mayo. Si un paciente no responde a los medicamentos, la cirugía puede ser necesaria.
Los médicos recetan diuréticos para un corazón agrandado para reducir la cantidad de sodio y agua en el cuerpo, lo que ayuda a disminuir la presión sobre las arterias y el corazón, explica la Clínica Mayo. Los inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina, o ECA, pueden disminuir la presión arterial y mejorar la capacidad de bombeo del corazón en algunos pacientes. Los médicos recetan bloqueadores de los receptores de la angiotensina, o ARB, para pacientes que no pueden tomar inhibidores de la ECA. Los pacientes toman bloqueadores beta para mejorar la función cardíaca y para disminuir la presión arterial y la digoxina para mejorar las capacidades de bombeo del corazón y reducir el riesgo de insuficiencia cardíaca.
Los médicos pueden prescribir anticoagulantes para pacientes con corazones agrandados para reducir el riesgo de coágulos de sangre que conducen a ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares, señala Mayo Clinic. Los pacientes toman medicamentos antiarrítmicos para mantener sus corazones bombeando a un ritmo normal. Si los medicamentos no son efectivos, los médicos pueden implantar dispositivos médicos, como marcapasos, en pacientes con corazones agrandados o pueden recomendar cirugía de válvula cardíaca o de bypass coronario. Los pacientes con corazones agrandados que no responden a medicamentos u otras opciones quirúrgicas pueden necesitar un trasplante de corazón.