Las bolas de naftalina contienen sustancias químicas para mantener alejadas a las plagas y, como tales, también pueden disuadir a los ratones. No obstante, es probable que no eliminen los ratones de una casa por completo.
Las bolas de naftalina generalmente se dosifican con para-diclorobenceno o naftaleno, ambos dañinos para los animales, incluidos los ratones. Evitan que la sangre se coagule y también son dañinos para los humanos si se tragan. Sin embargo, las bolas de naftalina generalmente solo hacen que los ratones eviten ciertas áreas. La mejor manera de librar a una casa de ratones es encontrar los puntos de entrada. Los propietarios de viviendas deben bloquear todos los puntos de entrada para que los ratones no puedan entrar y luego usar las trampas para los ratones restantes.
