Una razón común por la que las personas usan guantes de goma al lavar los platos es para proteger la piel de las manos. El agua caliente y los productos químicos de los jabones para platos pueden secar la piel. Los dermatólogos recomiendan usar guantes cuando trabajen con productos de limpieza y agua.
Además de ayudar a mantener la piel suave, los guantes de goma protegen las manos contra las infecciones. Es una buena idea usar guantes mientras lava los platos para cubrir cortes y abrasiones. Los guantes protegen estos cortes del dolor y las posibles infecciones por el contacto con agua sucia y jabonosa.
El uso de guantes de goma también proporciona un mejor agarre al lavar los platos, ya que el agua jabonosa hace que los platos sean resbaladizos. En el caso de que se rompa un plato, los guantes ayudarán a evitar lesiones en las manos debido a los residuos afilados que se esconden en el agua turbia y jabonosa.
A algunas personas les gusta usar guantes cuando lavan los platos para que no tengan que tocar las partículas viejas de alimentos y los utensilios usados. Los guantes de goma son una forma ideal de evitar el contacto con los gérmenes que se encuentran en los platos y utensilios usados.
Los guantes de goma también protegen las uñas. Los químicos del agua y el jabón debilitan las uñas, haciéndolas más vulnerables a romperse y rasgarse. Además, el uso de guantes puede ayudar a evitar que se astille el esmalte de uñas.