El History Channel explica que la Revolución rusa estuvo compuesta por dos revoluciones más pequeñas, la primera de las cuales llevó al derrocamiento de Nicolás II, el último zar ruso, y la segunda fue dirigida por Vladimir Lenin y los bolcheviques. Los bolcheviques eran un grupo radical de revolucionarios de extrema izquierda que deseaban inculcar el marxismo en Rusia.
Los bolcheviques fueron los principales catalizadores y tomadores de decisiones durante la Revolución Rusa, y sus violentas tendencias los llevaron a ser conocidos como el partido político más temido, pero más influyente, en la historia de Rusia. El objetivo principal de los bolcheviques era unificar al pueblo de Rusia contra las clases altas y los imperialistas. La revolución rusa comenzó en 1917, afirma The History Channel, cuando el último zar de Rusia fue derrocado. Este evento marcó el final del gobierno imperial en Rusia y eventualmente llevó a un gobierno democrático. Mientras se implementaba un gobierno provisional, el partido bolchevique aprovechó la oportunidad para aprovechar el impulso del pueblo ruso y derrocar también al nuevo gobierno interino. En su lugar, Vladimir Lenin se instaló como el líder del nuevo gobierno marxista y se esperaba que representara todos los ideales y políticas del partido bolchevique.