Los camellos que viven en América del Sur son presa de gatos grandes, como leopardos y jaguares. Los camellos de África y el sur de Asia no tienen depredadores naturales.
Los camellos africanos viven en ambientes hostiles y hostiles, como el desierto del Sahara, donde no sobreviven grandes depredadores, lo que evita que se conviertan en presas. Naturalmente, los depredadores como los leones comen camellos al igual que otros animales con pezuñas, pero muchos de estos depredadores no pueden sobrevivir en el desierto. Los consumidores de carne no están lo suficientemente bien adaptados para sobrevivir en un terreno desértico, mientras que los camellos pueden pasar largos períodos de tiempo sin comida ni agua, lo que hace que el camello esté a salvo de los depredadores.