About.com explica que las estructuras homólogas son partes de anatomías de organismos que comparten un origen común en formas ancestrales. Las funciones de estas características pueden modificarse con el tiempo, pero las estructuras están claramente relacionadas en términos generales. detalle anatómico. Un ejemplo de homología animal es el origen común de la extremidad superior tetrapod. Esta estructura forma una pata delantera para la mayoría de los vertebrados que habitan la tierra, pero es un brazo en humanos y un ala en murciélagos.
Aunque las piernas, los brazos y las alas de los murciélagos tienen usos muy diferentes, cada uno comparte una estructura subyacente en común con los demás y habla claramente de su origen común. El brazo humano comienza con un solo hueso, el húmero, que tiene una articulación esférica en el hombro y una articulación articulada en el extremo. Allí, se une a dos huesos más pequeños, el radio y el cúbito, que terminan en una muñeca. De la muñeca, emergen cinco dígitos. Las alas de los murciélagos comparten la misma configuración, aunque sus dedos son más largos y están conectados por la piel. Las patas de los caballos también son muy similares, aunque han perdido todos menos uno de los cinco dedos ancestrales.
Las estructuras homólogas no deben confundirse con estructuras análogas, que comparten una función pero no una historia evolutiva. Un ejemplo de esto es el ala de un murciélago o un pájaro y el ala de un insecto. Realizan la misma función, pero no emergen de la ascendencia común.