Los recuentos de glóbulos blancos bajos pueden ocurrir cuando los pacientes tienen afecciones que interfieren con el funcionamiento de la médula ósea o afecciones como el cáncer, las infecciones virales y los trastornos autoinmunes, según la Clínica Mayo. Las infecciones graves también pueden hacer que el cuerpo use más glóbulos blancos de los que puede producir.
Los glóbulos blancos, también llamados leucocitos, ayudan al cuerpo a combatir las infecciones, señala MedlinePlus. Los médicos ordenan los recuentos de glóbulos blancos como parte de un recuento sanguíneo completo durante los exámenes de rutina, según la Asociación Americana de Química Clínica. La prueba también se puede realizar si un paciente muestra síntomas de una infección, un trastorno de la sangre o un sistema inmunitario deteriorado.