Las lavadoras mecánicas, los arenosos, los solventes químicos y los removedores de pintura comerciales pueden eliminar la pintura en aerosol de las paredes de ladrillo. Dado que el ladrillo es una superficie porosa, los líquidos comerciales pueden penetrarla, por lo suficiente para este tipo de superficie.
Siempre es más fácil quitar la pintura en aerosol del ladrillo justo después de que se aplique. Cuando la pintura en aerosol se dirige accidentalmente a una pared de ladrillos o cuando los vándalos pintan con graffiti una estructura de ladrillos, es importante reaccionar rápidamente.
En algunos casos, la pintura en aerosol se desprenderá de las paredes de ladrillo cuando una lavadora a presión o un arenador de arena apunte hacia la pintura. La fuerza de la corriente de agua o arena se desprende de la pintura en aerosol hasta que ya no es visible. Sin embargo, los blasters de soda o sandblasters podrían dejar una sombra visible que puede arruinar la apariencia del ladrillo.
Los disolventes comerciales y los agentes de limpieza son la mejor opción si las lavadoras a presión o los arrastradores de arena no funcionan. Aplique un solvente destinado a usarse en superficies porosas según las instrucciones del fabricante. Siempre use equipo de seguridad apropiado cuando trabaje con productos químicos agresivos. Un respirador puede ser necesario, por ejemplo, especialmente cuando el usuario no está trabajando en un área ventilada.
El ladrillo presenta numerosas divots pequeñas y agujeros en la superficie. Si es imposible eliminar la pintura en aerosol por completo, siempre existe la opción de pintar toda la pared o superficie para disimular el graffiti o el rocío de pintura accidental.