El hijo de Beth Moore, Michael, fue devuelto a su madre biológica a la edad de 11 años después de mucha oración y contemplación. Aun así, todavía lo ve con regularidad. Después de que Moore y su esposo Keith criaron a dos hijas, adoptaron al hijo de 4 años de un amigo cercano, y cuando la madre biológica pudo criar a Michael de nuevo, la familia Moore lo devolvió.
Moore crió a Michael como su propio hijo durante siete años. Devolver al niño a su madre biológica fue una de las varias pruebas que soportó a lo largo de su vida. El proceso de adopción se expuso en el libro de Moore "Feathers for My Nest", en el que explica lo difícil que fue para ella dejar a Michael.
Moore sufrió abusos cuando era niño, según la revista Joy. La mujer dirige Living Proof Ministries, un grupo que alienta a las mujeres a basar sus vidas en los principios cristianos. A pesar de haber sido criada por padres cristianos, su lucha por liberarse de la esclavitud le permitió formar una relación diferente con Dios.
La revista Charisma explica que el abuso ocurrió desde los 5 años hasta el final de la escuela primaria. Además, la madre de Moore murió de cáncer y sufrió problemas de autoestima cuando era adolescente. Todos estos contratiempos le permiten a Moore crear su ministerio para mujeres con sede en Houston.