La función principal del útero es nutrir un óvulo fertilizado, según News Medical. Durante la gestación, el óvulo se convierte en un feto y finalmente en un bebé cuando está lo suficientemente desarrollado para el parto. El útero también proporciona soporte estructural para los huesos de la vejiga, el intestino y la pelvis.
Cuando el óvulo se fertiliza, se planta en el endometrio, según News Medical. El endometrio es una membrana mucosa interna del útero de los mamíferos. Cuando el óvulo se ha implantado en el endometrio, los vasos sanguíneos crecen alrededor del óvulo para proporcionarle nutrición. En el transcurso de nueve meses, el óvulo se convierte en un feto. Al cabo de nueve meses, el feto está listo para el parto.
Los vasos sanguíneos y los nervios del útero dirigen la sangre a los ovarios, labios, vagina, genitales externos y pelvis, informa News Medical. Cuando se liberan hormonas durante el coito, el útero dirige el flujo de sangre a la vagina. Este flujo de sangre es necesario para la respuesta sexual y para alcanzar el orgasmo. Durante el coito, el útero se contrae para ayudar a los espermatozoides a llegar a las trompas de Falopio. Las contracciones uterinas también son necesarias durante el parto. Las contracciones hacen que el cuello uterino se dilate, lo que permite que el bebé se mueva hacia abajo, lo que da como resultado el parto.