En una célula animal, el citoplasma es una sustancia semilíquida que contiene todos los orgánulos celulares, excepto el núcleo. También actúa como depósito de aminoácidos, azúcares y otros nutrientes importantes que se utilizan en La vida regular de la célula. Finalmente, el citoplasma almacena los desechos de una célula hasta que se elimina de la célula.
El citoplasma consta de tres partes principales. La parte principal, que representa más del 50 por ciento del volumen de una célula, es el citosol. Esta sustancia gelatinosa está compuesta de agua, enzimas disueltas y sales. El segundo componente principal del citoplasma son los orgánulos celulares. Estas estructuras, como las mitocondrias, el retículo endoplásmico y el aparato de Golgi, realizan importantes partes metabólicas y reproductivas del ciclo de vida de la célula. Los orgánulos se suspenden en el citosol y obtienen los nutrientes que necesitan para realizar sus funciones a partir de esa sustancia. Finalmente, el citoplasma contiene elementos indisolubles, como almidones y gotitas de lípidos, que ayudan a almacenar sustancias químicas importantes. Las funciones celulares importantes, como la división celular, la glucólisis y la síntesis de proteínas, tienen lugar en el citoplasma, y también son hospedantes del citoesqueleto, que proporciona estructura a la célula animal. A diferencia de las células vegetales, el citoplasma de las células animales no contiene cloroplastos.