Los principales factores que llevaron a la caída del Aksum en el siglo séptimo fueron el cambio climático y la obstrucción de las rutas comerciales internacionales alrededor del Mar Rojo provocada por la creciente supremacía de los musulmanes en Etiopía. Otros factores contribuyentes incluyeron una reducción en el rendimiento de los cultivos debido al cultivo excesivo de la tierra, la interferencia persa y el auge del cristianismo en la región.
Según las historias locales, hay otras teorías sobre el declive del Aksum. La tradición etíope sostiene que la civilización Aksum fue derrotada por la reina judía Yodit, mientras que otra teoría afirma que la caída del imperio fue causada por la reina pagana del sur, Bani al-Hamwiyah.