Las observaciones de laboratorio, como se usan en las ciencias sociales, llevan a los sujetos de estudio a un entorno de laboratorio para completar la investigación. Si bien la observación de laboratorio otorga un mayor control sobre los sujetos, tiene el potencial de introducir variables No existen en el mundo real. Las observaciones de laboratorio permiten a los investigadores recopilar datos de manera más eficiente de lo que son capaces de hacer en el entorno natural.
En un estudio de observación de laboratorio, el investigador se asegura de que esté presente en el momento en que quiera observar y registrar los datos de los sujetos. En este contexto, el investigador puede observar comportamientos que no puede observar utilizando el entorno natural del sujeto. Sin embargo, esta configuración artificial presenta inquietudes de que los comportamientos observados nunca podrían ocurrir fuera del laboratorio.
Otra opción para el científico social es completar el estudio en el entorno natural del sujeto. El investigador observa los comportamientos de los sujetos en el entorno donde ocurren normalmente. Este tipo de experimento proporciona al investigador oportunidades para observar comportamientos más realistas. Sin embargo, el ambiente natural crea mayor dificultad para hacer observaciones. Tales experimentos son generalmente más costosos y requieren más tiempo. En ciertos estudios, el entorno natural presenta peligros físicos para el científico, que se eliminan fácilmente en una observación de laboratorio controlada.