Cualquier longitud de texto de una obra literaria puede identificarse como un pasaje. En la mayoría de los casos, se hace referencia a un pasaje porque se puede percibir que el extracto contiene algún tipo de significado mayor.
En las escuelas e iglesias, un pasaje a menudo se examina desde muchos puntos de vista diferentes. Este cambio de perspectiva se presta a una mejor comprensión de la historia en sí o de la alusión que se está haciendo. Cuando un pasaje es referenciado por otra obra literaria, es citado o validado con una fuente y se utiliza como una herramienta para concebir otras ideas que aluden a escuelas de pensamiento similares.