Uno de los temas de "La famosa rana saltarina del condado de Calavaras" trata sobre las mentiras y el engaño. Mientras que el lector ve lo engañoso que es el extraño quien engaña a Jim Smiley, el protagonista, también es Smiley quien engaña. Smiley intenta engañar a las personas para que crean que los animales con los que apuesta son cojos o discapacitados sin posibilidad de ganar la apuesta. Sin embargo, muchas veces gana la apuesta.
Schmoop dice que Smiley está "justamente indignado", lo que significa que está enojado de tal manera que siente que es la emoción legítima después de que el extraño lo engañe al ponerle codornices en la rana llamada Dan'l Webster. Parece que a Smiley le están devolviendo el pago por sus propias mentiras y engaños, aunque algunos dicen que solo está siendo listo.
La distinción entre inteligencia honesta y deshonesta es otro tema. Jim Smiley es inteligente en cuanto a cómo engaña a otros con los animales que usa mientras apuesta. Aunque está siendo listo, a pesar de no ser particularmente bien educado o bien hablado, no está mintiendo o engañando a sus oponentes como lo hace el extraño. A esto se reduce la moralidad. La inteligencia en sí misma no es deshonesta, pero la forma en que el extraño gana la apuesta de la rana es inteligente pero de una manera deshonesta.
