El héroe moderno en la literatura suele ser más un hombre común que un héroe clásico. Los héroes modernos son personajes complejos que generalmente tienen fallas y problemas con los que las personas pueden relacionarse. Por lo general, no van en una búsqueda física; su búsqueda es más interna.
El héroe moderno, en comparación con un héroe clásico, es más un "Joe promedio" que se ocupa de los problemas que todo el mundo encuentra. Estos pueden ser conflictos personales o internos, búsquedas filosóficas de conocimiento o autodescubrimiento, viajes hacia la realización personal o la felicidad o incluso búsquedas que impliquen la aceptación de un miembro de la familia.
Los héroes modernos generalmente tampoco tienen ningún tipo de poderes o habilidades especiales, lo que los hace más como una persona promedio. El héroe moderno no es el superhéroe extra-fuerte como Dios, como Hércules, Beowulf o Odiseo. El héroe moderno suele ser una persona normal con problemas realistas.
Los ejemplos del héroe moderno incluyen a Jay Gatsby en "The Great Gatsby" y Elizabeth Bennet en "Pride and Prejudice". Estos héroes son personas sin ningún poder adicional, aparte de la riqueza monetaria, y realizan búsquedas que son de naturaleza conceptual. En lugar de intentar alcanzar un lugar especial o encontrar un objeto sagrado, están buscando la realización personal.