Un ejemplo de validez predictiva es evaluar la efectividad de las universidades que utilizan el promedio de calificaciones de los estudiantes de secundaria como un factor clave de aceptación de la inscripción. Los investigadores comparan los grados de primer año de los estudiantes con sus GPA de la escuela secundaria para ver si sus GPA se han mantenido cerca de los mismos.
La validez predictiva es un componente valioso en los procesos de prueba, en particular para las pruebas psicológicas utilizadas en el tratamiento clínico y en la investigación. También es esencial en las pruebas de aptitud y carrera, ya que estas pruebas ayudan a determinar qué tan exitosa podría ser una persona en una ocupación elegida.
La validez predictiva es una subcategoría de la validez de criterio, que se considera un aspecto integral de la educación y la ciencia del comportamiento, así como la psicología.