La reacción de Maillard es el nombre dado a una reacción entre azúcares, aminoácidos y proteínas cuando se somete a calor. En la cocina, produce pardeamiento de los alimentos y crea sabores complejos.
La reacción de Maillard se llama así por su descubridor, Louis-Camille Maillard, quien la describió por primera vez en 1912. Ocurre a temperaturas que oscilan entre 122 y 329 grados Fahrenheit y da como resultado mezclas complejas de moléculas que varían según la comida se dore. Los alimentos que obtienen algo de su sabor de la reacción de Maillard incluyen carnes braseadas, asadas o asadas; productos horneados los recubrimientos de alimentos fritos; cebada malteada; y jarabe de arce.