Una tez de couperose, también conocida como telangiectasia, es una tez rosa permanente con enrojecimiento difuso en el cuello, la nariz y las mejillas, de acuerdo con Minerelle. Esta afección involucra el sistema circulatorio y generalmente está acompañada por pequeños vasos sanguíneos rojos dilatados.
Minerelle afirma que los síntomas de una piel de cuperosa incluyen un enrojecimiento delicado en el cuello, la nariz y las mejillas, aparición frecuente de enrojecimiento y capilares visiblemente rotos. Los caucásicos y las personas con pieles ligeramente pigmentadas a menudo tienen esta tez. La condición es típicamente hereditaria. La tez de Couperose también afecta a las personas mayores a medida que la piel se vuelve más delgada y más frágil con la edad. Las personas con piel más oscura no desarrollan couperose porque la pigmentación más oscura y la mayor producción de aceite protegen los capilares. Además, la piel más gruesa y oscura tiene un mejor aislamiento que la piel delgada, clara y seca.
La complexión de Couperose se produce porque las paredes capilares se expanden pero no regresan rápidamente a su tamaño normal debido a una pérdida de elasticidad de la piel. Esto conduce a capilares visibles y enrojecimiento persistente en la piel. La exposición al sol, las temperaturas extremas y los factores de estilo de vida, como fumar y el consumo de alcohol, tienden a empeorar la condición. Minerelle aconseja que las personas con esta afección deben proteger su piel utilizando un bloqueador solar con dióxido de titanio u óxido de zinc y manteniéndose fuera del sol siempre que sea posible.