La oxidación es el proceso por el cual el hierro se convierte en óxido de hierro. Sucede cuando el hierro entra en contacto con el agua y el oxígeno. El proceso es un tipo de corrosión que se produce fácilmente en condiciones naturales.
La corrosión es un proceso electroquímico que requiere un cátodo, un ánodo y un electrolito. Un ánodo es un material que libera electrones fácilmente, mientras que un cátodo es un material que acepta electrones fácilmente. Un electrolito es un líquido que permite que los electrones se muevan libremente. La oxidación es una ocurrencia tan común que se encuentra poco hierro puro en el mundo. En la mayoría de los casos, se convierte en óxido de hierro.