La conservación del agua se refiere a cualquier reducción beneficiosa del uso, la pérdida o el desperdicio de agua. También incluye las estrategias y actividades para administrar y proteger los recursos hídricos para satisfacer la demanda de consumo humano.
La conservación del agua implica reducir el uso del agua y reciclar las aguas residuales para diversos fines, como la limpieza, el riego y la fabricación. Otro método para implementar la conservación del agua es mejorar las prácticas de gestión del agua. Estos mejoran el uso de los recursos hídricos para beneficiar a las personas y al medio ambiente. La conservación del agua es importante porque el agua es un recurso finito y vulnerable que sostiene la vida, el desarrollo económico y el medio ambiente.